Saturday, December 30, 2006

'International Action Center' (EEUU) hace un llamamiento a la acción en respuesta a la ejecución de Saddam Huseín y a la ocupación de Iraq


Convocadas manifestaciones para hoy en EEUU contra la ejecución de Sadam Huseín


Declaración de 'International Action Center'* (IAC), 30 de diciembre, 2006IraqSolidaridad (www.iraqsolidaridad.org), 30 de diciembre, 2006Traducido del inglés para IraqSolidaridad por Paloma Valverde


"[...] Esta condena no tiene nada que ver contra los presuntos crímenes del dirigente iraquí ni es parte de un juicio histórico de su papel en la historia. Es el acto de un poder conquistador contra una nación que ha sido ocupada contra su voluntad [...]"
El IAC mantiene que el gobierno de EEUU es el responsable de la decisión del "Tribunal Supremo iraquí" de llevar a cabo la sentencia de muerte contra el presidente Sadam Huseín y considera esta ejecución parte del plan del gobierno Bush para, una vez más, potenciar la guerra. El momento de la ejecución ha sido decidido claramente para adelantarse a la noticia de que el número de muertos estadounidenses en servicio es de 3.000, mientras que los iraquíes [asesinados] se cuentan en cientos de miles. Tal ejecución es otro crimen de guerra contra el pueblo iraquí.
Como hemos señalado claramente en anteriores comunicados y artículos, el IAC considera ilegal la captura, el proceso y la sentencia del presidente iraquí a la luz de la legalidad internacional, de las leyes estadounidenses o de la legislación iraquí. Esta condena no tiene nada que ver contra los presuntos crímenes del dirigente iraquí ni es parte de un juicio histórico de su papel en la historia. Es el acto de un poder conquistador contra una nación que ha sido ocupada contra su voluntad, no sólo contra la voluntad de su legítimo gobierno de 2004, sino además contra la voluntad de la gran mayoría de su pueblo.
No existe ningún organismo u organización de derechos humanos con autoridad, incluyendo a sus detractores y abiertamente contrarios al presidente Sadam Huseín, como Human Rights Watch, que consideren justo ni su juicio ni su condena.
El ex Fiscal general de EEUU, general Ramsey Clark y fundador de IAC, que ha formado parte del equipo de letrados de la defensa de Sadam Huseín, declaró a los medios de comunicación tras tener constancia del plan para ejecutarle que, "[...] Sadam Huseín y el resto de los acusados están bajo custodia del ejército estadounidense en Iraq. Serán entregados a Iraq sólo con la orden o el permiso del presidente Bush. Esta decisión, aún pendiente, traerá consecuencias a largo plazo para la paz y la estabilidad de Iraq y para el imperio de la ley como un medio para obtener la paz."
El gobierno Bush está preparando el anuncio de su "nueva estrategia" para Iraq. Esto es consecuencia de las elecciones de noviembre que fueron una declaración del electorado estadounidense contra la guerra, [es] consecuencia de la publicación del informe del Grupo de Estudio de Iraq, que fue el reconocimiento de que la ocupación estadounidense de Iraq había fracasado y que el desastre estaba cerca.
La ejecución de Sadam Huseín es un signo claro de que el gobierno Bush no pretende negociar la forma de salir de Iraq, sino que está enviando un mensaje de que continuará la guerra y la aumentará a pesar del desastre que se avecina. Esta conclusión es absolutamente evidente, puesto que se ve reforzada por las noticias, fuera de Iraq, de que EEUU y las tropas marionetas iraquíes están atacando, deteniendo y asesinando a miembros y dirigentes del Ejército del Mahdi, dirigido por Moqtada as-Sáder.
IAC está en contra de la ejecución de Sadam y del resto de los acusados, en contra de la escalada de la guerra en Iraq, lo que significa más muerte para los iraquíes y para las tropas estadounidenses así como un incremento en las movilizaciones para poner fin a la ocupación de Iraq. Aplaudimos la decisión de la organización MECAWI, en Michigan, de salir a las calles hoy mismo y manifestarse ante el edificio del gobierno federal contra el linchamiento de Sadam.

SADDAM

Lo asesinaron ahorcándolo, lo asesinaron los mismos que colocaron armas en sus manos, los mismos que lo mantuvieron en el poder 25 años.

Más cínicos que todos los cínicos, son los políticos norteamericanos que fueron sus sotenedores mientras les sirvió. "La justicia de los vencedores" dice Amnistía Internacional.

Su proceso fue seguido por todo el mundo, se le vio siempre orgulloso y desafiante, fue al cadalso igual, además sosteniendo el sagrado Corán. Todo el mundo lo sabe, su proceso fue arreglado y manejado por la CIA, fueron asesinados los abogados que intentaron defenderlo. Ha caido el telón con la muerte de quien fue un tirano. Saddam Hussein.

En Chile murió hace poco un tirano al que nadie pudo, nadie quiso, nadie tuvo voluntad, nadie fue capaz, nadie tuvo las huevas bien puestas para condenar al fusilamiento, a causa de tanta atrocidad cometida por Augusto Pinochet, tan dictador y tirano como Saddam.

Pinochet, murió como un cerdo bien cebado, tranquilo y con la bendición de un clero corrupto encabezado por el cura como se llame, Errázuriz, quien en una pose de santidad que más parece de gay, dijo a la feligresía que estarían gozando de la presencia de dios, ¡vaya! hígado del dios ese, recibir a un asesino cargado de noble sangre humana que hizo correr por las mazmorra del Chile bajo su mandato, a los que hizo desaparecer.

Y, ya, murió Sadam, el mono chimpancé de Bush, podrá cagar tranquilo, por ahora, por un tiempo, pero, solamente por un tiempo eso esperamos... Papelglifo Undurraga

Amnistía Internacional deploró ejecución de Saddam

Amnistía Internacional (AI) deploró hoy la ejecución de Saddam Hussein y afirmó que las alternativas del proceso y de la condena a muerte del dictador fueron "una ocasión frustrada" para indagar sobre los crímenes cometidos durante su régimen.
La organización de defensa de derechos humanos recordó su oposición "incondicional" a la pena de muerte y subrayó que "es aún más detestable desde el momento en que esta "pena extrema fue impuesta después de un proceso injusto".
"El proceso a Saddam habría podido ser una gran ayuda para la justicia y la determinación de la verdad y de las responsabilidades por las enormes violaciones de los derechos humanos cuando él estaba en el poder. Pero el proceso estuvo marcado por graves defectos", afirmó Malcolm Smart, jefe de la sección Medio Oriente y África de Amnistía.
Esta ejecución, agregó, "será vista por muchos como la justicia de los vencedores, y desafortunadamente no hará nada para bloquear la ola de asesinatos políticos".
"Cada acusado, prosiguió Smart, tiene derecho a un proceso justo sean cuales fueren los crímenes por los que haya sido incriminado, un hecho ignorado por décadas de tiranía de Saddam Hussein".
"Su caída – agregó – era la oportunidad de restablecer este derecho elemental y al mismo tiempo hacer recaer sobre el la responsabilidad de los crímenes pasados de manera justa. Pero fue una ocasión frustrada".

Monday, December 25, 2006

CHILE: LOS DICTADORES PASAN LOS EMPRESARIOS QUEDAN.


por Patricio Altamirano patricioaltamirano@ gmail.com

Pinochet vivió esta los 91 años, gozo de buena salud y de cuidados, tuvo una vida propia de los sectores de las capas medias que ascienden y se integran al grupo dominante. Su ancianidad fue privilegiada. La mayoría de los ancianos no tienen acceso a los privilegios que gozó Pinochet, que son propios de la clase alta chilena. La mayoría de los ancianos de 91 años tuvieron empleos con bajos sueldos, y desde 1973 vienen sufriendo una perdida de poder económico terminando sus días con jubilaciones muy bajas concurriendo a los consultorios y hospitales públicos propios de las personas que tienen Fonosa “A” de indigencia o “B” de sueldos bajos. Ojala todos los ancianos del país pudieran acceder a los hospitales que tienen los privilegiados, entre ellos el difunto Pinochet. Se comenta que frente al último embate de su salud la ambulancia demoró 7 minutos desde su casa al hospital y que esta rapidez permitió que saliera del infarto al miocardio, si la ambulancia se hubiera demorado más la muerte habría llegado antes. Los ancianos de las comunas populares como El Bosque, La Pintana no tienen posibilidad alguna de llegar en 7 minutos, debido a la distancia de las postas. El genocida vivía en los Flamencos Nº 3796, en La Dehesa, en la comuna de lo Barnechea, una de las comuna con más adinerados del país y una de las más exclusivas. Si la desigualdad social es abismal entre los adultos, es una afrenta a la conciencia humana ver como los ancianos de las comunas populares están condenados a vivir menos que los ancianos de las comunas de clase alta.La horripilante desigualdad social crea una segregación social insoportable que se expresa en que los hospitales están ubicados en las comunas de los adinerados, donde ellos habitan la clase social que controla este país. Los dirigentes de la UDI, RN, PDC, y también del PR, PPD y PS, viven en las comunas más adineradas y son vecinos, no solo ellos sino también la mayoría de los Senadores y Diputados, de los miembros del Poder Judicial, y los funcionarios públicos de alta graduación, todos ellos podrán llegar a la posta de algún Hospital Top en 7 minutos y ser atendidos de inmediato, el resto de seguro correrán otra suerte. Los últimos días de Pinochet mostraron las grandes desigualdades en el acceso a la salud que creó la Dictadura Militar Burguesa y que la Concertación ha agudizado en vez de contener. La planeación de la muerte de Pinochet: La impunidad absoluta. Si hay una característica de Pinochet en sus 91 años fue su oportunismo y la capacidad de esperar el último minuto para actuar, digamos que es una característica de las capas medias. Por ejemplo, en el ultimo minutó se sumó al Golpe de Estado, desconfiando de la fuerza de la derecha ubicó a su familia en una guarnición cuyo militar a cargo era un pro Allendista para asegurarse si fracasaba el Golpe. Volvamos al tema que nos convoca. El infarto sello la suerte de Pinochet en el Hospital Militar y permitió la elaboración de una estrategia para planear su muerte, su funeral y generar su futura iconización. Su estado de salud era una incógnita para todos su críticos era como el cuento del lobo, ya nadie creía nada, esta situación jugo a favor de la familia Pinochet y de sus abogados. Pablo Rodríguez Grez uno de los abogados más importantes del país, y uno de los fundadores y lideres de Patria Libertad, la cuna de la actual UDI, desarrollo la estrategia, junto al hábil Augusto Pinochet esto recuerda los viejos tiempos en que Patria y Libertad conspiro y junto a militares golpistas. La estrategia de los golpistas civiles y militares, representados en los ex Patria Libertad, Pinochetistas, era recomponer los lazos de la familia militar (activos e inactivos) con el último acto del General para salvar a todos sus leales, este consistía en: La muerte de Pinochet significaría la amnistía en todos sus juicios y quedar en la absoluta impunidad, esto traía aparejado dos hechos: Con esto se detienen las investigaciones de las causas de los derechos humanos.Más importante aun se termina las causas por los dineros apropiados por Pinochet y su familia. Este punto era el más importante por que se buscaba detener el desprestigio de Pinochet en la clase alta y los militares en retiro. Si Pinochet asume toda la responsabilidad política por las atrocidades cometidas en la dictadura esto ayuda a todos los miembros activos y en retiro que están en juicio. Estos lo usarán apelando la verticalidad del mando y dirán que actuaron por órdenes de Pinochet, así se dejará en la impunidad a todos los militares y civiles involucrados en crímenes. En conclusión se busca transformar en un Icono la figura de Pinochet y su legado político, se quiere lograr que la sociedad chilena lo reconozca como padre de la Patria. Esto es asumido rápidamente, entre otros, por Patricio Navia integrante de expansiva, quien titula su columna de la Tercera del lunes 11 de diciembre: “La Muerte del padre”, Pinochet padre del Chile Actual. Lo central de la estrategia está en el “Testamento político de Pinochet que estaría guardado en una notaría de Santiago”(1), recordemos lo que dijo el dictador el día de su cumpleaños: “Augusto Pinochet emitió el día de su cumpleaños una desusada declaración, que fue leída por su esposa y en la que Reivindicó el cruento golpe militar que lo llevó al poder en 1973, Asumió la responsabilidad política por todo lo ocurrido durante su dictadura Y criticó los juicios a los militares por las violaciones de los derechos humanos. "Hoy, cerca del final de mis días, quiero manifestar que no guardo rencor a nadie, que amo a mi patria por encima de todo y que asumo la responsabilidad política de todo lo obrado", señaló la declaración” (2).“Augusto Pinochet reiteró el argumento de que el golpe militar evitó una guerra civil en Chile, pues fue resultado "de contiendas civiles que los militares no provocamos. Nos obligaron a actuar en defensa de la libertad y la democracia en un mundo convulsionado en que se debatía la suerte de la humanidad"(3) .El testamento político de Pinochet dirá las mismas palabras del extinto dictador: asumir en ultimo minuto toda la responsabilidad política, esto se convierte en una carta de garantía para la toda la familia militar, la familia empresarial y para la derecha. El libreto de los ex Patria Libertad y los Pinochetistas estaba listo se esperaba la muerte, la impunidad y la iconización. Un funeral que iconiza la dictadura. Es cierto que cuando alguien se muere sus seres queridos se preocupan de él, y todos los que lo estiman van a su funeral. Si el personaje actuó mal hay muchos que se alegran de su muerte por lo malvado que fue, en el caso de Pinochet el fue un genocida entonces la alegría de su muerte es absolutamente valida, también es esperable que en sus funerales se expresen las criticas y el perdón hacia los que afectó. Era esperable que la familia lo defendiera, y que la sociedad se pronunciara, que se produjera una condena masiva. Entonces se esperaba un funeral modesto, que estuviera la familia y los amigos y que los embargara la vergüenza.El funeral fue todo lo contrario, fue la exaltación de la obra de la dictadura. Recordemos que esta ceremonia protocolar fue planeada por la ex ministra de defensa Michelle Bachelet junto al ex comandante en jefe del Ejército Emilio Cheyre, esto bajo el Gobierno de Ricardo Lagos, sin considerar el llamado “exabrupto” del nieto de Pinochet todo lo demás se ciño al protocolo pactado por la Concertación y el Ejército. Que el acto se haya realizado en la Alma Mater del ejército, que estuvieran las nuevas generaciones de oficiales, significa, que el Ejército desea perpetuar el golpismo como la estrategia política del empresariado nacional y que ellos están dispuestos a seguir el ejemplo de Pinochet. Esto es absolutamente impresentable para la conciencia de la humanidad, es un hecho insólito, solo admisible por el concubinato de la Derecha y la Concertación. El protocolo pactado entre la Concertación y el Ejército se conjugó con el libreto planeado por los ex Patria Libertad y los Pinochetistas. El golpismo civil y militar se hizo presente ni más ni menos que en la figura del nieto del dictador vestido con tenida militar que logra fraguar el imaginario colectivo que Pinochet no esta muerto, se proyecta lo más profundo del discurso de la derecha chilena en la voz de: Augusto Pinochet Molina“[Pinochet] era uno de los líderes más prominentes de su época a nivel mundial, un hombre que derrotó en plena Guerra Fría al modelo marxista que pretendía imponer su modelo totalitario, no mediante el voto, sino más bien derechamente por el medio armado”(4).Estas palabras podrían haber pasado como un “exabrupto” propio de la familia del difunto si la audiencia lo hubiera percibido de esa manera, si el público hubiera hecho una mueca que indicaba lo inoportuno. Los asistentes al funeral, con excepción de la representació n del gobierno, estaba conformaba por lo más granado de la Clase Alta, ellos reaccionaron “con enérgicos aplausos que le expresaron los adherentes al dictador apostados en el Patio Alpatacal de la Escuela Militar”(5) al escuchar las palabras del nieto del general. Las palabras de Augusto Pinochet III representan a todos los asistentes en la Escuela Militar, no fue un exabrupto sino fue una expresión de lo más recóndito del empresariado nacional, de la burguesía golpista. Como vemos el pinochestismo encarna el discurso de la ultra derecha en base a la fraseología anti marxista que expresa su total rechazo a la participación política de los trabajadores, y el absoluto rechazo de que estos tengan un proyecto político propio. Para la ultraderecha los trabajadores son sólo mano de obra barata, eso y nada más. Todas estas muestras de exaltación del golpismo fueron también apoyadas por parte del Clero de la Iglesia Católica, personificado en el Arzobispo Monseñor Errázuriz quien “pidió que Dios obvie lo malo de los actos de Pinochet”, esto es una afrenta a la conciencia de los creyentes, y de quienes son fervorosos defensores de los derechos humanos. EL Golpismo de Pinochet o el Plebiscito de Allende(6). El actual comandante en jefe del Ejército en su discurso de despedida en la Escuela Militar planteo lo siguiente: “Cuando el general Pinochet resuelve actuar el 11 de septiembre de 1973, lo hace en el convencimiento que no había otra salida posible a la crisis.El general Izurieta comete una falsificación histórica en el rol de Pinochet. Oscar Izurieta miente. Olvida que Allende estuvo reunido hasta tarde el día 10 de septiembre de 1973 planeando la convocatoria a Plebiscito y Pinochet estaba a cargo de la seguridad de ese evento. Izurieta, Pinochet, la derecha olvidan que el plebiscito era la solución constitucional y que los golpistas impusieron una salida terrorista que era innecesaria. Los totalitarios no eran la Unidad popular o el MIR sino el Partido Nacional y su proyección en la UDI y RN. Pinochet fue un traidor. Allende el día 11 de septiembre en plena resistencia al golpe estaba preocupado de Pinochet, el decía es seguro que Pinochet estará en una cárcel junto a los otros militares constitucionales. Allende en su último discurso no lo menciono por que lo pensaba leal. Lo que esconden los golpistas civiles y militares fue que Pinochet estuvo por el Golpe y Allende había optado por el Plebiscito. La Dictadura de los Empresarios o la Republica Democrática de los Trabajadores. En conclusión este funeral-homenaje fue un acto de resurrección de la Dictadura, de las atrocidades, y mostraron la arrogancia de quines por la fuerza derrotaron el proyecto de los trabajadores representados en la posturas de la Unidad Popular y el MIR, que construían una republica democrática de los trabajadores Los ex Patria y Libertad, la UDI, RN y el pinochetismo saben que si bien han perdido el poder ejecutivo, en las empresas se vive la dictadura empresarial esto es para ellos es lo más importante. La derecha unida sabe que tienen el apoyo de la DC y de los renovados en el proyecto empresarial. Un botón de muestra son las proposiciones del Senador Ominani, militante del Partido Socialista, ex miembro del MIR, quien plantea eliminar la indemnización por años por servicio, esta es una conquistas que la derecha por si misma no ha podido quitar a los trabajadores. Vemos como la derecha tiene un gran apoyo en los Renovados (PPD-PS) quienes son los que han radicalizado el programa económico de la derecha. Esta situación es parte de la práctica de los nuevos empresarios que se han forjado en la transición. Los empresarios en la transición han agudizado la distribución del ingreso a favor de los capitalistas; han intensificado la subcontratació n que despoja a los trabajadores de estabilidad laboral; cada vez hay más trabajadores sin previsión y sin salud; se reprimen a los sindicatos, y a los dirigentes; en las huelgas los empresarios aplican todo su poder y los trabajadores cuentan con una débil fiscalización por parte de la inspección del trabajo. Se va el dictador y queda la burguesía terrorista que impide que sus trabajadores tengan derechos, es el mismo estilo de la oligarquía y de los terratenientes de antaño. Pinochet fue el dictador de turno de la una burguesía golpista que se resiste a los espacios democráticos. Fue el elegido por una minoría que no permite que existan diferentes proyectos de país, antes lo fueron: González Videla, Carlos Ibáñez del Campo, entre otros (7). Los dictadores pasan los empresarios quedan. El rol de los dictadores es eliminar a los trabajadores organizados, es extirpar de la clase trabajadores las ideas de organizarse, es trasformar a la clase trabajadora en una clase desprotegida y sin capacidad de resistencia. Esta tarea golpista, de civiles y militares, crea el mundo ideal de los empresarios, en él no hay sindicatos, y existen salarios bajos que son la contratara de las sobre ganancias de los Matee, Luksic, Angelini, Said, entre otros. Una vez que los golpistas entregan el “poder” los empresarios se quedaran con su mundo ideal sin sindicatos fuertes. Pero los empresarios chilenos tiene una debilidad ideológica y política para defender su proyectos de desarrollo siempre tiene que recurrir a los dictadores para derrotar a los trabajadores. Si los empresarios dependen de la fuerza militar esto quiere decir que los trabajadores jamás han sido vencidos, siempre se reponen y se reorganizan para construir una patria para todos, retoman el camino de construir una República Democrática de los trabajadores.Notas al Final1.- http://www.terra. cl/noticias/ index.cfm? id_cat=302& id_reg=7152022.- http://www.hechosde hoy.com/articulo .asp?idarticulo= 105513.- Idem anterior.4.- Miércoles 13 de diciembre de 2006, http://www.lanacion .cl/5.- Miércoles 13 de diciembre de 2006, http://www.lanacion .cl/6.- Una profundidad de este tema lo encuentra en Punto Suspensivo Nº7, en el articulo “Chile entre la Democratizació n y el golpismo (I), El futuro es de los memoriosos: El plebiscito de la UP-MIR un eslabón de la democracia directa (11 de Septiembre de 1973)”, Patricio Altamirano. 7.- Una profundidad de este tema lo encuentra en Punto Suspensivo Nº8, Chile entre la Democracia y el golpismo (II), Los ciclos golpistas de la Derecha, Patricio Altamirano.

Friday, December 22, 2006

ANTONIO SKARMETA, SU FORMACION EN BUENOS AIRES, LOS CAMINOS DEL EXILIO Y LA AVENTURA DE ESCRIBIR
“Para una novela, lo mejor es zarpar y ver qué pasa”





“Mi vida en la Argentina fue un tiempo glorioso, para mí fue un desgarro brutal tener que volver a Chile”, dice el escritor, que afrontó un derrotero de exilios que dejó marcas en su obra, en títulos como No pasó nada, La boda del poeta, Ardiente paciencia o Reina la tranquilidad en el país. “Cuando escribo una novela, siento una alegría mayor: dejo que las imágenes se precipiten sin tratar de encontrarle una lógica especial”, cuenta.

Por Silvina Friera
Página 12

“Si no hubiera vivido esos años en Buenos Aires, no habría podido hacer la literatura que realmente terminé haciendo.”
Cuando habla, dice naturalmente algunas palabras que escuchó a fines de la década del ’40. La “barra” del barrio, la “patota” o “peliagudo” podrían convencer al desprevenido oyente del hotel de Recoleta –donde se aloja– que el escritor Antonio Skármeta nació en la Argentina. Pero pronto el uso del “tú” y un acento inconfundiblemente chileno morigeran esa agresividad canchera que lo haría asimilarse con un porteño más. “Me formé en esta ciudad entre 1949 y 1951, fui alumno de una escuela pública, la Casto Munita de Belgrano, y recuerdo ese tiempo como el más feliz de mi vida”, confiesa a Página/12. “Como era la etapa en la que pasé de la niñez a la adolescencia, mi sensibilidad estaba plenamente abierta y oía todas las campanas. Mi alma se colectivizó en el rito de la patota del barrio, con los chicos que me juntaba en la esquina a jugar a la bolita. A los 10 años trabajé como repartidor en una frutería y tenía mi propio dinero para comprarme libros. Era una época en la que llegaban muchos jóvenes de las provincias; conocí a varios de Santiago del Estero que venían a trabajar. Tenía muchos amigos, mayores que yo, que vivían en una pensión de la calle Mendoza, donde tocaban zambas, chacareras, vidalitas. Aprendí mucho oyéndolos.” El autor de Ardiente paciencia llegó al país para participar de la mesa redonda Los caminos de la memoria: cine y exilio, en el marco de la muestra Literaturas del exilio, que se puede ver hasta el 11 de febrero en el Centro Cultural Recoleta.
Skármeta se explaya, a gusto, sobre su experiencia en la Argentina. “Tuve maestros geniales en la escuela primaria que, cuando detectaron que a mí me gustaba la poesía, me dieron a leer poemas que tenía que aprender de memoria para las festividades públicas, como el Día de la Bandera. Yo aparecía en el estrado con mi delantal blanco, con la escarapela argentina, y recitaba versos de Neruda, Rubén Darío o del Martín Fierro. Fue un tiempo glorioso. Para mí fue un desgarro brutal tener que volver a Chile.”
–¿Por qué vinieron sus padres a la Argentina?
–No podían subsistir económicamente en Chile y pensaron que en Buenos Aires les iba a ir mucho mejor. Y afortunadamente, diría, no les fue bien acá. Porque esa pobreza que vivimos fue la escuela de mi vida. Si no hubiera vivido esos años en Buenos Aires, no habría podido hacer la literatura que realmente terminé haciendo.
–¿Cómo vivió el exilio después del golpe de Pinochet?
–En primer lugar me desgajó de una historia natural de crecimiento con mi gente, de esa mutua interrelación entre el escritor y su pueblo. Me sacó abruptamente de una historia espiritual que se venía gestando desde mi nacimiento y me puso en un afuera completo; por lo tanto el trabajo del exilio implicó casi reconstituir esa unidad perdida, ya sea a través de una mirada nostálgica y creativa sobre el pasado que nos unió como pueblo-escritor; ya sea a través de confrontar las situaciones dramáticas que produjo esta alternativa o ya sea imaginando y deseando un futuro distinto, y que este idilio ininterrumpido celebrara por fin sus nupcias. Mi exilio fue tiempo de padecimiento y de crecimiento. Padecimiento, en el sentido de que es extremadamente doloroso saber que lo que origina el exilio es una brutalidad mayor, insoportable para cualquier persona sensible, más en el caso de un artista. Si tú estás exiliado, te puedes abrir a la cultura local y crecer dentro de ella, entregarle tu corazón, tu inteligencia y por lo tanto nutrirte de otras culturas y otras realidades locales que fortalecen tu imaginación, y después, probablemente, tu acción política. Y la otra opción, que siguieron compañeros más desesperados, fue la de encerrarse en ghettos nostálgicos, considerando que el exilio era un tiempo de espera y no de creación, más que nada de espera política para los que tenían militancia.
–¿Y usted se nutrió de la cultura alemana?
–Sí, me abrí completamente porque entendí que trabajando con la cultura local y con la gente que fraternalmente se nos acercaba, estaba de alguna manera actuando políticamente. Para convencer al otro de que le tienda una mano a mi gente, que está oprimida o sufriendo, tengo que saber con quién hablo y para eso necesito conocer su sentido del humor, sus lecturas; tengo que acercarme a sus clásicos, haber leído a Schiller, a Goethe o a sus filósofos, como a Heidegger. Tengo una visión bastante balanceada del exilio: fue un tiempo de padecimiento y de crecimiento, que contribuyó a mi literatura, a mi vida y al servicio político de mi país.
–¿En qué sentido la experiencia del exilio alimentó su literatura?
–He tematizado el exilio en varias de mis obras, fundamentalmente en No pasó nada, en la que opté por contar el exilio desde una perspectiva desideologizada, puesto que los exiliados llevaban consignas emocionales muy fuertes e ideas muy rígidas del bien y del mal; eran portadores de una derrota, de un fracaso. Opté por narrar desde la voz de un joven de 15 años que tiene que ser fiel a los dos códigos: al código de los padres, es decir la fidelidad por la derrota y la recuperación por el paraíso perdido, pero al mismo tiempo tiene que rendirse y cumplir con el código que le propone la calle y la otra cultura. La ironía, una mirada más ingenua y más fresca me permitieron transmitir la emoción del exilio. Mi novela favorita es La boda del poeta, que me llevó a irme muy atrás en la historia europea, al exilio de mis abuelos, que eran emigrantes dálmatas que llegaron a Chile. Buscando las raíces, me apropié del pasado europeo, desde una perspectiva latinoamericana, con un lenguaje bastardo, irónico; un lenguaje que ha pasado por la literatura latinoamericana para meterse en una situación que les “pertenecía” a los europeos; era como robarle las uvas al zorro.
Skármeta se fue de Chile a Alemania el 12 de octubre de 1973. “Es una fecha imposible de olvidar porque fue como hacer el viaje de Colón, pero al revés”, ironiza el autor de Ardiente paciencia. “Consegui un trabajo que consistía en escribir un guión de cine y el director proponía que fuera sobre lo que estaba pasando en Latinoamérica”, cuenta el escritor. El director es el alemán Peter Lilienthal, para quien en 1972 ya había escrito un guión sobre los conflictos que estaban originando en Chile los cambios políticos. Ese primer guión devino en el film La Victoria, donde se narra la vida de una dactilógrafa provinciana, solitaria, que llega a Santiago y, al encontrar la ciudad convulsionada, se interesa más por ser alfabetizadora que por llevar adelante una vida burocrática. Esta primera experiencia cinematográfica sería el comienzo de una duradera atracción por el cine que condujo a Skármeta a escribir varios guiones, y que motivó a otros directores a realizar adaptaciones fílmicas de sus cuentos o novelas. Por pedido de Lilienthal, Skármeta se trasladó a la Argentina, entre 1973 y 1974, donde escribió su segundo guión, Reina la tranquilidad en el país. “El problema era dónde filmar una película acerca de la brutal represión de la ultraderecha en América latina a sus pueblos. Si tú mirabas el mapa de América latina en 1973, no había dónde hacerla”, explica el escritor. “Entonces con el director decidimos irnos a Portugal, porque en ese país había triunfado una revolución libertaria, y nosotros necesitábamos un ejército democrático que actuara como ejército represor. ¿Dónde lo íbamos a conseguir en América latina? Imposible; pero en Portugal logramos que los regimientos de una ciudad portuguesa que se llama Setúbal, que queda como a 200 kilómetros de Lisboa, actuaran como soldados represores. Hablar del cine del exilio y de cómo se hace, es hablar de proezas de prestidigitador.”
–¿Pero qué es más difícil en el exilio: escribir literatura o hacer cine?
–Hacer literatura no cuesta absolutamente nada, quizá lo más difícil es que te publiquen una historia que concierne a un grupo determinado que quizá lo que menos quiere es leer porque está luchando por su sobrevivencia, o que debiera concernirles a quienes quedaron en el país y que a su vez están demasiado ocupados para evitar la muerte como para estar leyendo. El tema es peliagudo: ¿quién es el lector de la literatura del exilio?
–¿Y quiénes eran sus lectores?
–Me leía el público europeo. Tenía ya escrita una novela y un volumen de cuentos, que habían sido traducidos a unos doce o quince idiomas, y desperté el interés de directores de cine que adaptaron algunos de estos cuentos. Así que rápidamente pude establecerme con mis temas, con mis obsesiones, con mis preocupaciones y sentimientos en el ambiente cultural europeo, que fue donde tuve a mis primeros lectores, porque mis libros no circularon en Chile prácticamente durante todo el tiempo de la dictadura.
–¿Qué diferencias habría entre escribir una novela y un guión?
–Cuando estoy escribiendo una novela, siento una alegría mayor, porque uno busca la novela que quiere escribir, es una creación mucho más libre. Dejo que las imágenes se precipiten sin tratar de encontrarle una lógica especial. En una primera versión de la novela intento evitar que el intelecto o la inteligencia coarte mis sentimientos, mis emociones, mi imaginación. En una segunda versión ya aplico la técnica literaria, ordeno esos materiales de manera que resulten interesantes, entretenidos, y ojalá emocionantes para el lector. En el guión de cine, y tengo experiencia porque hice muchas películas en Europa, es mejor tener un panorama total: cuando das un paso, tenés que saber adónde vas a dar el siguiente.
–Todo lo contrario de una novela, ¿no?
–Sí. En el guión de cine todo apunta hacia el final, hay que ir enredando las historias, y en cada paso vas pisando terreno minado, vas agitando una historia paralela, menor o que concierne a un personaje secundario. El guión es como un plan de ataque; en cambio para la novela, es mejor no tener plan de navegación, echarte a zarpar y ver qué pasa.


ANTONIO SKÁRMETA NACIÓ el 7 de noviembre de 1940 en Antofagasta, al norte de Chile. Actualmente se desempeña como Embajador de Chile en Alemania. Estudió Filosofía y Literatura en la Universidad de Chile y se graduó en Columbia University, en Nueva York, con una tesis sobre la novelística de Julio Cortázar. En 1967, publicó su primer libro de cuentos, El entusiasmo, y en 1969 obtuvo el premio Casa de las Américas con el volumen de relatos Desnudo en el tejado. Ha sido profesor de Lenguas y Literaturas Romances en Washington University, Saint Louis, Missouri, enseñando Literatura Hispanoamericana.
Algunas de sus obras:
El entusiasmo (cuentos, 1967)Desnudo en el tejado (Premio Casa de las Américas, 1969)Tiro libre (cuentos, 1973) La composición (cuentos, 1998)El ciclista del San Cristóbal (antología de cuentos, 1973)Novios y solitarios (antología de cuentos, 1975)No pasó nada (noveleta, 1980)La insurrección (novela, 1980)Uno a uno. Cuentos completos (1995)La boda del poeta (novela, 1999)La chica del trombón (novela, 2001)

cuento:
TELEFONIA CELULAR
Los días de pago, Pedro Pablo Salcedo apartaba de su sueldo dos billetes azules y almorzaba en el mismo restaurant que sus patrones. Allí se ofrecía un "menú ejecutivo", expresión que le causaba melancolía, pues como contador de la editorial lo único que "ejecutaba" eran órdenes de sus superiores: básicamente atrasar lo inhumanamente posible los pagos a los acreedores. Doce veces al año se daba el placer de inaugurar ese almuerzo con el tequila de un "Margarita Jumbo" y de redondearlo con un cognac "Remy Martin". El trayecto entre ambos licores lo cubría mediante una botella de vino tinto cuya marca variaba de menos a más. En diciembre había puesto el colofón gastronómico del año pagando por un "Don Melchor", el mosto más caro que ofrecía la plaza.Estos almuerzos finales lo reconciliaban con las asperezas de su trabajo y con esos sueños de grandeza inhibidos o secretos que larvados asomaban en sus ojos en chispas de envidia o resentimiento. Para su mala suerte, justo en lo que debiera haber sido su plácido balance mensual con el mundo y sus frustraciones, un episodio que se desarrollaba en la mesa vecina consiguió desestabilizarlo.Una bella mujer se había inclinado sobre el mantel e intentaba con elocuencia convencer de algo al hombre que la oía mirando hacia la puerta del local con desesperada paciencia. El énfasis en sus manos pálidas, acentuadas por dos anillos con diamantes, la hacía intensamente expresiva, y desde su esquina Salcedo no lograba apartar la vista de aquellos desprejuiciados muslos a los que el fervor de su discurso y la escueta minifalda de cuero le habían dado una excitante plenitud.De pronto sonó el teléfono celular junto a la panera de la pareja y el hombre de pelo rubio, visiblemente aliviado por esa interrupción, atendió raudo la llamada. La hermosa mujer miró al artefacto encendida por la cólera y echando hacia atrás la silla con violencia derramó la servilleta sobre los camarones ecuatorianos recién servidos y abandonó el restaurant haciendo tintinear las llaves del auto. El hombre interrumpió la charla telefónica, puso el celular sobre una silla, alargó dos billetes de diez mil sobre el mantel, y corrió tras ella.Acariciándose un pómulo, Salcedo deseó haber sido actor de un drama como ése, un arrebato de pasión y celos que animara su vida, la voz de una amante próxima a sus lóbulos conminándolo a decisiones, la suave trama de aroma emanantes de esas mujeres que resbalaban a toda página en las satinadas revistas que leía en peluquerías o consultorios.Mientras la sorprendida camarera despejaba la mesa de los amantes fugaces, terminó de servirse las papayas en almíbar y puso su atención en el celular abandonado sobre la silla. Cuando la sirvienta levantó el mantel y fue a la cocina, seguro ya de que no había advertido el artefacto, se animó a filtrarlo en un bolsillo de su chaqueta.Al término de otra semana irrelevante, por fin había ocurrido una aventura.En la oficina extrajo el teléfono del saco, se aflojó la corbata, y limpiándose las manos en los pantalones como si quisiera borrar las huelas de un delito, detuvo la vista sobre la abrumadora cantidad de boletas con que los oficinistas querían hacerse pagar gastos privados como actos de servicio a la compañía. Él hubiera preferido mil veces haber usado todos esos dineros en vez de ser el acucioso árbitro de lo legítimo, lo fronterizo y lo inaceptable.Convencido de que los rangos dentro de la empresa eran más bien cosa del azar que de los talentos individuales, se propuso vagamente no permitir que toda su personalidad se agotara en la función que desempeñaba. Junto entonces la puerta se abrió y una ráfaga de aire produjo una sensación de hielo sobre su cuello húmedo. Era su jefe, quien procedió a tirarle informalmente un talonario de cheques sobre el escritorio.-¿Almorzó bien, Salcedo?-Sí, señor Mackenna -dijo, poniéndose de pie.-¿Con postre y todo?-Papayas, señor.-Haga cheques sólo para los casos más urgentes. Los otros trate de aplazarlos cuanto pueda.-Sí, señor.La atención del hombre fue capturada por el celular sobre la mesa. Avanzó con autoridad, lo levantó en una mano y lo mantuvo a cierta altura balanceándolo para sentirle el peso.-Es el modelo más liviano que ha salido -comentó.-No lo sabía, señor.-Y el más caro. Es usted todo un ejecutivo, hombre.Salcedo se sintió simultáneamente confundido y halagado. Trajo a sus labios una sonrisa modesta y miró el artefacto disimulando su orgullo. El gerente se pasó la mano por el bien peinado cabello rubio y le hizo un gesto admirativo frunciendo la boca.Cuando el señor Mackenna se hubo retirado, Salcedo cogió rápidamente el celular y lo balanceó en la izquierda imitando con exactitud lo que había hecho su superior. Con un cantito disimuló un bostezo siestero, y se hundió en los expedientes, el lápiz rojo censor entre los labios, un Bic verde para los okeys. El cabo de algunos minutos se detuvo al descubrir una boleta de Zúñiga que incluía la cuenta de un hotel en Viña del Mar, en circunstancias que su zona de venta era Osorno, ochocientos kilómetros más al sur. Pero Zúñiga era un fresco simpático, lo trataba a él, Salcedo, de "jefe" y se ruborizaba por cualquier cosa. Marcó la boleta con el lápiz verde. Depende de la ruta que se tome, Viña puede estar camino a Osorno, se dijo indiferente.Entonces sonó el celular. Un tono más distinguido qye el del teléfono. Amable, pero también compulsivo. Se acarició la mandíbula replegándose sobre el respaldo del sillón giratorio. Estiró la mano sobre el aparato, hizo correr la vista sobre las distintas señales, y al pulsar el índice sobre la tecla verde, sorpresivamente quedó conectado.-Soy Mónica.Supo sin pensarlo, que lo más atinado sería no contestar. Dejó que el silencio creciera, intuyendo por el tono que había empleado la mujer que ésta iba a ser una pausa dramática.-¿Estás enojado conmigo?-No -se oyó decir.-Me porté como una rota, ¡dejarte así de repente! Me debes odiar, ¿cierto?-No, no.-Es que todo es tan complicado. Bueno, no sólo para mí. Para ti también.-Sí.-¿Me quieres todavía?-Sí.-¿Con pasión?-Sí.-¿Me perdonas entonces?-Sí.-No puedes hablar ahora, ¿cierto?-No.-Quiero verte esta noche, Ernesto. ¿Lo puedes arreglar?-¿Y tú?-No me importa nada. Si tú puedes, yo puedo.-Puedo.-¿A las ocho donde siempre?-No, donde siempre no.-¿Dónde entonces?Salcedo corrió con la mano derecha la cortina sobre el ventanal y estudió el paisaje del Barrio Alto, ese sector que le era conocido pero también ajeno. Este derroche de lujo hecho para otro, no para él con sus trajes de marcas menores y esos zapatos que parecían ir gritando su menguado costo en cada paso. La visión de la cúpula de un edificio cilíndrico sobre la Kennedy lo hizo volver a la llamada.-En el "Highland" -dijo.Te amo -dijo ella.-Te amo -dijo él.Puso el celular sobre la ruma de cuentas y comenzó a escribir los cheques del personal con una caligrafía vibrante, un trazo que difería en volumen y presión del rutinario.A las cuatro de la tarde había concluido con los sueldos, y tras entregar los respectivos cheques la cajera, fue a lavarse las manos y la cara al baño. Se frotó las mejillas con vigor y luego le propinó ceremoniales golpes de peineta a su pelo áspero y tupido. Pude comprobar con un vanidoso gesto de las cejas que era más joven y acaso más alto que el amante de cabellos rubios.A la salida del toilette, con un súbito impulso se abalanzó sobre el talonario e hizo un cheque a su nombre por una cantidad importante. Luego fue hacia la cajera y le pidió que se lo canjeara en efectivo. La mujer obedeció sin requerir detalles, aunque por mera rutina comprobó que el documento estuviera endosado.A las seis, vio alejarse a los colegas rumbo a sus domicilios, contento por no tener que subirse a esos buses hostiles en esta hora de fatigoso tráfico. Tuvo compasión por ellos, y sintió que esta piedad era una prolongación natural de la tristeza de reconocerse uno más entre sus pares.-Hasta ahora -se dijo en voz alta.Detuvo un taxi y le pidió al chofer que lo llevara al "Highland". En el tablero del coche vio que eran las seis y media, y puesto que el tráfico ya no era tan fluido, supo que estaría en su destino en unos quince minutos. Puso el fajo de billetes en sus rodillas y los fue contando mientras frotaba sus bordes para que no se pegaran."Me llamo Ernesto" pensó. "¿Pero Ernesto cuánto?"-Ernesto Mackenna -dijo en voz alta.El chofer lo miró por el espejillo.-¿Cómo dijo, señor?-No, nada.-Vamos siempre al "Highland", ¿no?-Al "Highland">.En la puerta del edificio permitió que el elegante bedel le abriera el auto y tuvo la duda si se daba propina en esos casos. Decidió que no. La propina se la daría al chico uniformado que ahora se ofrecía a llevarle el maletín.En la recepción puso el celular sobre el mesón y le dijo al conserje que quería un cuarto.-¿Para una sola persona señor?-Para dos.-¿A nombre de quién?.-Ernesto Mackenna.-¿Va a cancelar con tarjeta de crédito?-Al contado.Le extendieron la llave, el botones le acompañé hasta el piso quince, y entonces lo condujo a la pieza 1500. En cuanto estuvo solo fue hacia la ventana a reconocer el terreno. En centro en su vaho de smog, el Manquehue y su cumbre rebanada, las horrorosas torres eléctricas de Cuarto Centenario que siempre le evocaban sitios baldíos ajenos a ese sector. Por los cuatro puntos cardinales todo en orden. Su Santiago de siempre, pero visto de una perspectiva novedosa.-Novedosa -pronunció con claridad.De la mesita de luz, tomó el índice de servicios e hizo contacto telefónico con el conserje.-Le hablo de la habitación 1500. Quiero pedirle un favor.-Dígame.-A las ocho va a venir una dama a preguntar por mí. Por Ernesto. Dígale que suba directamente a mi habitación.-Muy bien, don Ernesto. ¿Ernesto cuánto?-Ernesto, no más. No me gustaría que esta dama supiera mi apellido. Se trata de una amiga, usted me entiende.Sí, señor.-Una diablura -dijo riendo.El recepcionista rió con complicidad.-No se preocupe, don Ernesto.En cuanto hubo colgado, marcó los dígitos del "room-service".-Quiero hacer un pedido.-A sus órdenes, señor.-¿Tiene champagne?-Sí, señor.-¿De cuál?-Nacionales e importados. Champagne francés. "Pommery". Lo tenemos en Brut y en Demi sec.-Es para compartir con una dama.Si es una dama distinguida, le sugiero Brut. El Demi sec se sirve en Chile en todos los matrimonios. No es tan… -el hombre se interrumpió.-Mándeme un Brut. Adentro de un balde con hielo y todo eso.-Por supuesto, señor.Se hundió en el lecho matrimonial estirando los brazos y las piernas y se detuvo en impecable cielo raso. Toda la pieza olía a nuevo y el tráfico de la Kennedy llegaba ahogado en un susurro eruditamente filtrado por los gruesos ventanales. Sin cambiar su posición digitó en el celular el número de su casa y le dijo a su esposa con prisa y autoridad, como molesto por tener que hacerlo, que un enredo económico lo retenía en la oficina.-Un funcionario de confianza giró un cheque no autorizado -explicó antes de colgar.El camarero trajo el balde con el champagne, lo puso sobre la mesa de caoba y encendió la lámpara insinuándole a Salcedo que apreciara las finas, sutilísimas copas elevadas junto al balde de plata. Al darle la propina el botones quiso saber si abría la botella.-Por ningún motivo -lo detuvo Salcedo.Hacer saltar el corcho del Pommery en presencia de la dama era algo estelar de su puesta en escena, un momento solemne en la intriga, sólo apto para los héroes de la historia. Por ningún motivo iba a dilapidar ese instante con un mozo común y silvestre.Faltaban quince minutos y abriendo una botellita de Chivas Regal del mismo bar la bebió desde el gollete sin declinarla con agua o hielo. Hundió la cabeza en el cuello, reconfortado por el certero efecto del alcohol en su ánimo, e hizo estremecer su mandíbula emitiendo un "brrr" histriónico. Después fue al baño a lavarse las manos y la cara. Otra vez trabajó el peine en la áspera mata de su cabello y al ponerlo de vuelta en el bolsillo de la chaqueta ensayó frente al espejo algunas poses distinguidas tratando de encontrar aquella que más convendría a la personalidad de Ernesto Mackenna. Eligió una, levemente sinvergüenza, donde levantaba al mismo tiempo la ceja y el labio derechos."Como irónico", se dijo. Como más allá de los hechos.Diez minutos más tarde dispuso las luces. Los cenitales podían apagarse. El lamparón del centro, de todos modos fuera. Nada de luz en los veladores.La lámpara de pie tenía tres intensidades. La contuvo en la menor y corrió las cortinas hasta dejar envuelto el ventanal en las ricas telas. Trajo las manos hasta la superficie del balde, las empapó en su frialdad y luego alivió con ellas sus mejillas ardientes.Al hundirlas después en los bolsillos del pantalón para sacar los fósforos, comprobó que estaba excitado. Hizo sonar la caja en su puño y retuvo las ganas de fumar.Se quedó junto a la puerta atento a los ruidos del pasillo y del ascensor que ahora se detenía en el piso con un armonioso timbre. Con la manilla entre los dedos, estudió el mecanismo del seguro. Presionando el cilindro la cerradura se bloqueaba, y si se ponía el cabezal de la cadena en la ranura metálica se evitaría que alguien con llave pudiera entrar desde fuera.Otra vez pudo oírse la señal del ascensor, luego sus placas abriéndose muellemente, y en seguida los inequívocos pasos en dirección a la 1500.Salcedo respiró hondo al oír el gong sobre su cabeza. Accionó la manilla delicadamente, entreabrió la puerta, y en ese espacio, semiclandestino, vio pasar a la mujer con un atractivo traje de noche. De inmediato cerró brusco la puerta y apoyando encima su espalda hundió el botón, y con una rápida maniobra insertó la cadenilla en la ranura.Ella miró desconcertada el amplio espacio y volvió la vista al hombre.-¿Dónde está Ernesto?La voz de Salcedo sonó carrasposa.-No vino. Es decir, no pudo venir.-¿Le pasó algo?Salcedo levantó el brazo y mostró con su índice la mesita y el champagne junto a la cortina crema.-Es necesario que hablemos.-¿Quién es usted?-Un admirador.Ella fue rápido hasta el baño, espió su interior, y luego revisó el closet.-¿Por qué cerró la puerta con cadena?-Para que estemos tranquilos.-¿Qué quiere?-Ayudarla.-No creo que necesite ninguna ayuda.-Sí necesita. Estamos frente a un caso de adulterio, ¿no es cierto?La mujer hizo amago de avanzar hacia la puerta, pero luego se detuvo, y volvió junto al ventanal. Salcedo le indicó que se sentara, puso el champagne dentro de la servilleta y presionando el corcho lo hizo saltar con un estampido. Antes de escanciar en las copas, insistió con un gesto para que tomara asiento. Ella puso su cartera a los pies de la silla y se frotó los muslos bajo la minifalda.-¿Qué quiere? -dijo, cruzando las piernas.-Sírvase champagne. Es francés.-No me interesa.-Vamos, sírvase una copa.La mujer probó un sorbo, pero ignoró el gesto con que él acercó su champagne proponiéndole que chocaran los cristales.-No quiero que haga nada que pueda perjudicar a Ernesto, ¿comprende?-No es mi ánimo perjudicar a nadie.-¿Qué es lo que quiere entonces?-Tomar un trago, charlar un poco.Salcedo se aflojó el nudo de la corbata y desprendió el botón del cuello. Estuvo un momento acariciándose la barbilla y puso algo más de líquido en su copa.-Yo a usted la he visto antes, señora.-¿Antes?-Hoy, sin ir más lejos.-¿Dónde?En un restaurante. Chino. Hasta le puedo decir el menú que pidió.Con un pestañeo apreció el impacto de esa información en la faz de ella. Dejó crecer el silencio y luego añadió fríamente:-Camarones.La mujer acercó el vaso a sus labios y fue bebiendo lento su contenido hasta agotarlo. El hombre se apresuró a rellenárselo. Ella descruzó las piernas, y se hundió en el pequeño sillón, sacudiendo su cabellera.-¿Qué es lo que quiere?-Me cuesta decir lo que quiero.-Dinero.El hombre le indicó la copa rellena animándola con un gesto de las cejas a que se hiciera cargo de ella. Ella se miró las rodillas y decidió cubrirlas con la cartera que tomó de los pies del sillón.Me gustaría que me dejara ir.Puede irse cuando quiera.-La puerta está trabada.Usted sabe muy bien que no es eso lo que le impide irse.-¿Qué entonces?El doble adulterio, señora.-No lo entiendo.-Usted, su marido. Ernesto, la mujer de Ernesto.Ella frotó el cuero de la cartera, como si quisiera protegerse en ese ademán.-¿Cómo sabe todo esto?Salcedo miró los muslos de la mujer, luego su frente, y finalmente su cabello castaño ligeramente desordenado.-"Quiero verte esta noche. ¿Lo puedes arreglar?" ¿Y tú?" "No me importa nada. Si tú puedes, yo puedo", recitó sin énfasis. La tecnología moderna, señora. Caen diputadas, senadores, generales. ¡Cómo no van a caer un par de amantes!Ella abrió la cartera y extrajo un talonario de cheques enfundado en cuero azul. Lo abrió y alisándolo con las palmas, levantó conminatoria la barbilla hacia el hombre.-¿Cuánto?Salcedo adelantó una mano y la puso sobre el dorso de la de ella.-No sabría decirle cuánto. No tengo la práctica.Sin embargo, no parece un chantajista aficionado.-Sólo ato una cosa con otra y saco conclusiones.Ella liberó la mano y volvió a esgrimir la poderosa lapicera.-Un millón. ¿Le parece bien?-Con eso no pago ni el hotel, señora. Menos el champagne. Es francés.-Millón y medio.Salcedo fue hasta la cortina, la corrió con violencia, y luego abrió el enorme ventanal. El tráfico se atochaba en la desembocadura de Vespucio con la Kennedy y parecía que todos los conductores se hubieran puesto de acuerdo para tocar sus bocinas. Una ambulancia hacía girar la luz azul de su sirena sin que los vehículos lograran organizarse para cederle paso.Prefirió no mirarla cuando dijo:-Me cuesta mucho expresarme. Pero no es dinero lo que me interesa.Ella se levantó y fue otra vez hacia el baño. Hizo correr el agua del lavatorio y se humedeció las mejillas. A través del espejo pudo ver que Salcedo se había acercado y la miraba. Puso dos dedos bajo el chorro y esta vez se mojó la frente apretando al mismo tiempo el ceño como si quisiera precisar el epicentro de una cefalea.Volvió hasta su copa y se sirvió el último sorbo.-¿Y usted no le llama "chantaje" a esto?El hombre hizo sonar una sonrisa golfa.-No, porque es la admiración lo que me mueve. No el dinero.-Y si no es chantaje, ¿cómo podría llamarlo?Salcedo levantó el labio y la ceja como Ernesto Mackenna.-¿Un "trueque"? -aventuró.Vino a su lado y con el dorso de la mano le acarició un pómulo. Ella levantó altiva sus ojos marrones enfrentándolo.-Hace mucho calor -dijo.Salcedo cogió entre sus dedos el botón superior de su blusa de seda y recorrió con las yemas su breve circunferencia cual si acariciara un pezón. Ese acto le reveló que el pecho de ella estaba convulso. Entonces rozó la parte superior de sus senos. Ella puso de súbito sus manos sobre las cejas, y luego se apretó las sienes con un gesto que parecía representar una descarga eléctrica dentro de su cráneo.-¿Qué le pasa? -preguntó Salcedo, abriendo el segundo botón, con la vista fija en los encajes del breve brassiere.La mujer observó la mano que manipulaba el resto de los botones y dijo con voz débil:-Soy una persona con tantos problemas. Y ahora esto.-Vamos, tómelo como una aventura.-Todo es tan complicado.-Eso mismo dijo en el teléfono.Salcedo desprendió el gancho del corpiño permitiendo que ambas partes cayeran sobre los senos. Dudó entre acercar sus labios para morder un pezón o esperar. Se contuvo.-Esta tarde estuve donde mi psiquiatra. Me encontró muy mal.-¿Por qué?-Por mis arrebatos. Me dejo llevar por mis impulsos. Hay veces que no puedo controlarme.-¿Cómo está tarde cuando se fue de golpe del restaurant sin servirse la comida?-¿También sabe eso?-Y también sé que usted me gusta mucho.Bajó la mano del pecho y acarició su vientre por encima de la falda.Abrazándola la condujo hasta la cama y la puso suavemente sobre la colcha color crema. El pelo se esparció y su rostro vulnerable quedó aún más expuesto en la frágil luz que cedía la lámpara de pie. Cuando Salcedo aproximó su boca buscándole los labios, ella se los negó con un gemido. El mojó entonces su lóbulo derecho con la lengua y luego cogió vigorosamente su barbilla y la sostuvo para asestarle un beso. Ella apretó los labios y negó con la cabeza.-Abre la boca -le ordenó Salcedo, ronco.Ella obedeció con las mejillas mojadas por un violento llanto y el hombre entró con su lengua profundamente en su boca y lamió su paladar. Ella volvió a gemir, ahogada, y quiso desprenderse empujándolo de los hombros, pero él la contuvo imponiéndole todo su cuerpo encima. La mujer fingió que cedía, y cuando Salcedo aflojó la presión pudo resbalar por debajo de su tórax hasta caer del lecho. Se puso de pie de un salto y al ver el ademán de él ofreciéndole el brazo para volver a atraerla, retrocedió de espaldas.-No quiero esto -dijo agónica.-¿Qué es lo que quieres entonces? -preguntó Salcedo, levantándose.La mujer calzó temblando los botones de su blusa, y recorriendo con la vista la penumbra de la habitación, pareció buscar una respuesta en ese espacio. Absurdamente hizo un repetido movimiento de negación con el cuello y hundió la barbilla en sus manos entrelazadas. Una brisa condujo su atención hacia la ventana abierta, y entonces, con un impulso que le pareció de una velocidad irreal se lanzó al vacío sin dar señales de su intención, sin agregar una palabra.Salcedo se sintió súbitamente petrificado, frígido en el hielo y la lividez que le treparon de los pies a la nuca. Pensó "Dios mío", pero no tenía sonidos en la garganta. Al turbulento tráfico de la avenida, se sumó ahora el de una alarma en los pasillos del hotel, estridente y sincopada como la bocina de una bomba de incendios. Recogió su chaqueta caída en la alfombra y sin ponérsela fue hasta la puerta de salida.Mientras trataba de destrabar la cadena, oyó sonar la campanilla del teléfono celular.Levantando el seguro, Salcedo salió hacia el corredor con la firme decisión de dejar esta vez la llamada sin respuesta.

Thursday, December 21, 2006

LA NÁUSEA

VISIÓN ISLÁMICA DE UN GIRÓN DE LA HISTORIA CONTEMPORÁNEA






Bismillah:
As salamu alaikum hermanos
Cuando mi acidez estomacal me lo permite, hecho una hojeada a los artículos de varios diarios americanos a los que estoy subscripta (si ya sé, que masoquista, ¿no? Pero bueno, es bueno ver lo que dicen los medios para entender como la mente de la masa americana es manipulada)
El punto es que durante mi sesión masoquista de hoy, se me ocurrió leer un editorial del Washington Post, que trata de Irán, la última elección y las futuras relaciones con Occidente (Rethinking Iran). Para que les cuento… El título del mensaje es suficientemente ilustrativo.
Transcribo el pasaje:

Perhaps most important, the elimination of political liberals from Iranian government should make it easier for Western governments to explicitly side with Iran's demoralized but still substantial pro-democracy movement, even if that offends Mr. Ahmadinejad. The new president, after all, is not worth much attention. He offers no real solutions to his country's problems; his populist policies are doomed to failure. For better or worse, his election has merely made the twin threats facing the Iranian regime -- domestic revolution or international isolation -- more acute.
“Quizás aún más importante, la eliminación de los políticos liberales del gobierno iraní debería hacer más fácil para los gobiernos occidentales ponerse explícitamente del lado del desmoralizado pero todavía sustancial movimiento pro-democrático, incluso si esto ofende al señor Ahmadinejad. El nuevo presidente, después de todo, no es digno de que se le preste demasiada atención. No ofrece soluciones reales a los problemas de su país, sus políticas populistas están condenadas al fracaso. Para mejor o peor, su elección solo ha hecho que las amenazas que enfrenta el régimen iraní, revolución interna o aislamiento internacional, más marcados.”
Veamos un poco esto. La última vez que chequeé la autodeterminación de los pueblos era un principio de Derecho al que todas las naciones pueden y deben tener libertad de acceder. De la misma manera, la intervención en los asuntos internos de un país es *ilicita* de acuerdo al mismo derecho internacional, los estatutos y convenciones de las Naciones Unidas, etc, de los cuales EEUU es signatario (por ende, esas disposiciones tiene el rango de ley interna de su nación).
Ellos dicen (o mejor dicho, predicen) que occidente se va a poner del lado de la oposición. Desde todo punto de vista esto es ilegal. Desde lo político, implica entrometerse en los asuntos internos iraníes.
Como dije, esto es ilícito, y no tengo que ir muy lejos para recordar que USA reacciona muy mal cuando ellos consideran que hay intromisiones dentro de su política interior. El caso de las condenas a muerte a ciudadanos mejicanos, por el cual USA fue condenado por el tribunal de La Haya al faltar a sus deberes dentro de las convenciones de Viena (de las cuales es signatario) es un buen ejemplo. Finalmente, después de grandes idas y vueltas, Bush decidió acatar el fallo internacional (a pesar del revuelo interno y patriotero). En los hechos fue una payasada, porque la Corte simplemente dejó todo como estaba. Cumplieron la letra de la ley violando el espíritu de la misma. Otro caso es como reaccionaron cuando la ONU no respaldó el ataque a Irak. Hoy vemos memos negando la legalidad de los ataques, y desaconsejándolos desde el punto de vista legal. Fíjense, los políticos yanquis (y el pueblo yanqui también) felicitaron a Bush por no dejar que “otros” (es decir la comunidad de naciones y el corpus del derecho internacional) dictasen “sus políticas de defensa”.
Es decir, usan la ley cuando y como les conviene. ¿Cómo pueden hablar de apoyar la democracia y la legalidad, refiriéndose en términos despectivos a un candidato electo por voto popular y legal, y al mismo tiempo incurriendo ellos en actos ilegales al intervenir en la política interna de otros países? Todos sabemos que lo último que USA quiere es democracia y legalidad. No se lo creen ni ellos, al menos no cuando están a solas con sus consciencias. Es la típica yanqui. Así conquistaron el Oeste, así le robaron las tierras más ricas a Mexico, así destruyeron todos los gobiernos democráticos populares de América Latina. No somos idiotas. Ya sabemos que significa apoyar a la “oposición democrática”. Los venezolanos lo viven día a día, igual a los cubanos. Apoyar a la “oposición democrática” es apoyar a los gusanos y canallas de siempre, a la oligarquía asesina y torturadora, que quiere gente pobre y dócil.
Irán no esta en la mejor forma. Y sí, hay que admitirlo, la culpa es de grandes sectores del poder constituido. Por lo que he leído en los propios medios americanos, este “populista” no solo es una persona de fe, sino que es una persona honesta y simple. Y esto es lo que ha llevado a los votantes a elegirlo. Esta persona limpió de corrupción la alcaldía de Tehran, que so solo estuvo en manos “conservadoras” antes, sino también en manos “progresistas”, tan desastrosos o quizás aún más que los “conservadores”.

Estos “defensores de la libertad” de Yanquilandia dicen que hablan por la “mayoría del pueblo iraní” (que “quiere una democracia” = quiere un gobierno pro yanqui donde los privilegiados de antes y algunos nuevos ricos puedan seguir refocilándose en riquezas mal habidas. A los latinoamericanos, estas “mayorías democráticas” nos suenan muy conocidas.) Dicen que no hay que tomar en cuenta al presidente electo, aún si se lo ofende. Concretamente, no importa si se ofende a la mayoría que lo votó. Después de todo, ¿Qué son, sino solo ciudadanos?
Honestamente todo esto me recuerda a lo que le pasó a Chile en 1973. Dijo Kissinger después de que Salvador Allende ganase las elecciones en Chile:


“No veo porqué debamos sentarnos y ver como un país se hace comunista a causa de la irresponsabilidad de su pueblo. Hay demasiado en juego para permitir a los votantes Chilenos que decidan por ellos mismos.”

Sabemos que les costó a los Chilenos esta decisión de Kissinger, que de la palabra pasó a los hechos en el otro once de septiembre, el pariente pobre del famoso ataque a las torres, pero que al final dejó diez veces más víctimas detrás. Treinta mil Chilenos murieron, porque “había demasiado en juego” para dejarlos elegir por si mismos.
Treinta mil, como aquí en Argentina. Trescientos mil en toda América Latina hasta mediados de la década de los ochenta.

Y después dicen que los odiamos porque ellos aman la democracia y la libertad y nosotros no, porque “no entendemos el concepto”. También dicen que es por “envidia” de su desarrollo económico. Sí, ese que ya costó cien mil víctimas civiles (Según The Lancet, y solo hablamos de hasta principios de este año. Imagínense ahora) en Irak por ese precioso oro negro que ellos malgastan es sus vehículos 4x4, con motores que consumen de una manera aterradora.

En fin, me pregunto, ¿cuantos muertos va a costar a Irán esta nueva “campaña para la libertad” (¿de quienes? ¿De los ricos de Wall Street?)? ¿Cuántos actos terroristas dentro de suelo iraní, pagados por sangrientos dólares?

Irán e Irak ya tuvieron un millón de muertos en la guerra pagada y patrocinada por Washington para destruir a la Revolución. Justo es pensar que esta vez no se detendrán con menos del doble.

Si en la dócil Latinoamérica mataron a trescientos mil, y hasta principios de año había cien mil muertos civiles en Irak, ¿Qué le espera a una nación orgullosa a la que no pudieron dominar en más de una oportunidad? Y más importante aún, ¿Qué rol tendrán los salafis, que seguramente ellos infiltrarán, como infiltraron en Irak?
No había atentados de wahhabis hasta que ellos llegaron. Sugestivo cuando menos.

Pero bueno, volviendo al tema original, vemos como la editorial deja picando la amenaza, revolución interna (fomentada con sus dineros, como en Venezuela) o (Yo diría “y”) aislamiento internacional ( a través de sanciones y bloqueos).
No es la primera vez que usan estas estrategias. Es la política del Imperio y lo ha sido por largo tiempo. Chile da testimonio de ello. ¿De que nos vamos a sorprender cuando leemos el Post, si la historia es aún más horrorosa?

Para que vean porque trazo un paralelo entre lo que pasó al Chile de Allende y lo que veo que se viene de parte de USA en Irán, les voy a dejar algunas citas de políticos yanquis, especialmente de Kissinger. .

“Hagan gritar a la economía (de Chile para) evitar que Allende asuma el poder, o derrocarlo.” Richard Nixon (no necesita presentación)
“Es (nuestra) firme y continua política que Allende sea derrocado por un golpe. Sería mucho más preferible que esto sucediese mucho antes del 24 de Octubre, pero esfuerzos a estos efectos continuarán vigorosamente más allá de esta fecha. Vamos a generar máxima presión para obtener estas metas, utilizando todos los recursos apropiados. Es imperativo que estas acciones sean implementadas clandestina y seguramente, de tal manera que las manos del USG (US Government= Gobierno de USA) y de América queden bien escondidas.” memo de Kissinger a la base de la CIA en Chile, Octubre 16, 1970" “Ni una tuerca o tornillo deberá llegar a Chile bajo (el gobierno) de Allende. Una vez que Allende asuma el poder, deberemos hacer todo aquello que esté en nuestro poder para condenar a Chile y los Chilenos a la mas extrema privación y pobreza.”
Edward M Korry Embajador de USA en Chile, después de ser notificado de la victoria de Allende.

Aca vienen algunas declaraciones de Kissinger que son especialmente reveladoras.Quiero recordar que este criminal con pedidos de captura de numerosos países (Chile, Argentina, España, Inglaterra y Francia) y al que USA se niega a entregar, recibió el Premio Nobel de la Paz el mismo año que ordenó el golpe en Chile, y teniendo ya en sus antecedentes el retraso por razones políticas del fin de la guerra de Camboya y el bombardeo ilegal de este mismo país, que al final ocasionó un millón y medio de muertes extra
“De todos los líderes de la region, considerábamos a Allende el más hostil a nuestros intereses. Era abiertamente pro Castro y opuesto a los Estados Unidos. Sus políticas internas era una amenaza a las libertades democráticas chilenas y los derechos humanos” H Kissinger en Years of Renewal ( comparen esto con el párrafo anterior del Post. Y luego compárenlo con lo que pasó bajo Pinochet. Después saquen sus propias conclusiones de loe espera a Irán… o al menos, de lo que ellos pretenden que le suceda.)
“Lo ilegal lo hacemos inmediatamente. Lo inconstitucional lleva un poco más de tiempo.”Henry Kissinger New York Times, Oct. 28, 1973
“Es un acto de locura y humillación nacional tener una ley que prohíba al Presidente ordenar asesinatos.” (dicho durante una reunión del Consejo de Seguridad Nacional en 1975) (Nota: Después de escándalos varios por asesinatos en los que la CIA estuvo comprometida, el Congreso de USA promulgó una ley prohibiéndole al Presidente que formalmente ordenase asesinatos de lideres opositores. De más esta recordar, que después del 9/11, el Congreso devolvió al presidente de USA completas facultades para ordenar el asesinato de personas que supusieran una amenaza a los intereses Americanos.
"Esfuerzos tendientes a limitar el número de habitantes del Tercer Mundo deberían ser la prioridad de nuestra política exterior, porque la economía de US requerirá grandes cantidades de minerales del exterior, las que irán en aumento, y provendrán especialmente de los países menos desarrollados" (se refiere al infame Memorando de Estudio de Seguridad Nacional 200 de Abril del 74 (N.S.S.M 200) en el cual EE UU propone alentar (e incluso hacer obligatorio) el control de la natalidad. Lo interesante del caso es que viendo de la manera feroz y descuidada en que la población americana hace uso de recursos naturales *que hoy en día roban a través de ocupaciones sangrientas* a los que deberían haberles obligado a practicar anticoncepción forzada y control poblacional es a ellos. Hoy, ya ni siquiera se preocupan en “programas humanitarios de control de la natalidad” Evidentemente, las balas son más baratas. Y si no, consulten a las poblaciones de América, Asia y África. Mas información se puede hallar aquí: (en español) http://www.seprin.com/informes/rnssm200.htm

“Los militares son idiotas, estúpidos animales que deben ser usados como peones de la política exterior.” H. Kissinger

“Los Estado Unidos deben llevar adelante ciertos actos en otras partes del mundo para mostrar su determinación de continuar siendo una potencia mundial” H. Kissinger
“El petróleo es algo demasiado importante para dejarlo en manos de los árabes.” H Kissinger
.
“Si las tropas de Naciones Unidas entrasen hoy en Los Angeles para restaurar el orden, el público americano reaccionaría escandalizado, pero mañana estarían agradecidos. Esto es especialmente válido si se les dijese que hay una amenaza exterior, fuese real o proclamada, que amenazase nuestra misma existencia. Sería así que todos los pueblos del mundo suplicarían a los líderes mundiales que los protegiesen de este mal. La única cosa que el hombre teme es lo desconocido. Cuando se les presenta este escenario, dejan de lado los derechos individuales en el afan de que su bienestar les sea garantizado por su gobierno mundial.” Henry Kissinger durante una reunión en Evian, Francia, Mayo 21, 1992 (Bilderburgers meeting). Sin que Kissinger lo supiese entonces, su discurso fue grabado por un delegado de Suiza a la reunión.
Supongo que esta última cita de Kissinger, hecha en 1992, nueve años antes del derrumbe de la Torres, debe estar causando más de un escalofrío en los que están leyendo esto. No, no es clarividencia ni ningún golpe de genio de esta persona. Es simplemente una demostración de cómo trabajan as políticas del imperio y cuan a largo plazo y desconsideradas de los derechos y vidas de las personas son los que las idea y llevan a la práctica.
¿Comprenden porque la nausea ahora? Por lo que fue, por lo que será. Dios nos proteja de estos satanaces, muy especialmente a los musulmanes, que estamos primeros en la fila del sacrificio. Dios de fuerza al pueblo iraní y les permita ver, que más allá de lo que han hecho y hacen algunas personas, lo que tienen es invaluable.
Dios apresure el regreso del Imam y nos libre de los malvados.
Ua salaam
Zahra

Wednesday, December 20, 2006

Chiste: George W. Bush y las bibliotecas



George Bush entra en una biblioteca y grita:
- ¡UNA HAMBURGUESA Y UNA DE PATATAS!
Un asesor se le acerca y le susura:
- Presidente que estamos en una biblioteca.
Bush, asintiendo, susurra:
- Una hamburguesa y una de patatas

Monday, December 18, 2006


CHILE: CRONICA DE LA NAUSEA

por Luis Sepúlveda (*)

La ceremonia fúnebre del viejo punga que ensombreció la historia de Chile durante dieciséis años fue algo más que patética; fue una desvergonzada exhibición de un fascismo todavía latente en un sector de la sociedad chilena, un sector que odia cualquier expresión democrática, un puñado de cretinos que son ni más ni menos que la cultura de la muerte instaurada por el dictador y sus cómplices civiles y religiosos.Todo el mundo vio los ataques sufridos por una periodista de la Televisión Española en las cercanías de la escuela militar (¿y qué demonios es eso: "escuela militar"?), protagonizados por un energúmeno de corte de pelo claramente militar, de camisa cerrada hasta el botón del cuello según los cánones de la estética militar, de movimientos torpes pero prepotentes aprendidos tal vez en la "escuela militar", de dentadura regular y simétrica como son las dentaduras uniformes que con cargo al erario público mantienen los dentistas militares, y con una oratoria que demostró su abolengo castrense; apenas le arrebató el micrófono a la periodista –a vista y paciencia de los carabineros que miraban el hecho- empezó un inspirado discurso castrense cuyos argumentos de más peso consistieron en gritar "españoles culiaos" y "que se vayan,po". Pero sus gestos rigurosamente castrenses lo delataban: ese imbécil es uno de los que se benefician con el 10 % de las exportaciones de cobre.Luego, todavía nos preguntamos qué se le perdió a la ministra de defensa en ese entierro. ¿Era necesario rebajar hasta ese extremo la dignidad de la sociedad civil? Lo más sensato y respetuoso con los miles de chilenas y chilenos que la sustentan en su cargo, con sus votos, hubiera sido en cuanto el obispo castrense (¿ y qué mierda es eso: "obispos castrenses"? ) empezó con su diatriba nacional católica de justificar la era de asesinatos, torturas, desapariciones, exilios, robos, rapiña, que empezó el día del golpe de Estado fascista ordenado por el imperialismo norteamericano el 11 de septiembre del 73. Ese cura de sable y cruz simplemente se cagó en la memoria de las víctimas, se cagó católicamente en la memoria de nuestros muertos, se cagó trinitariamente en los derechos humanos y dio por católicamente justo que estos fueran violados de manera sistematica.¿Por qué la ministra de defensa no ordenó al comandante en jefe del ejército que hiciera callar al oficialito tonto, al nieto de Pinochet, cuando empezó con su discurso de odio? Las palabras gruñidas por ese pequeño descerebrado que heredó la voz aflautada de su abuelo no pueden quedar impunes, porque ese tipejo vestido con su uniforme color asno pronunció un discurso que en ningún caso fue espontáneo, sus palabras eran conocidas por la plana mayor, el alto mando, o como demonios se llame el conjunto de mandamases del ejército, de ese Estado dentro del Estado que todavía no demuestra ni la menor señal de arrepentimiento por todos los crímenes y robos cometidos, y que inexplicablemente usurpa sin ningún derecho moral el 10 % de las exportaciones de cobre. Cuántas escuelas y hospitales se podrían construír con ese dinero que hoy se destina a alimentar a potenciales dictadores como el nieto del tirano.El 12 de diciembre fue ciertamente un día contradictorio, pues a la natural alegría de las víctimas y de los demócratas, se impuso el nauseabundo ritual de un puñado de fascistas que despedían al tirano con el brazo extendido a la manera nazi, y la presencia amenazante de esos que supuestamente llevan un uniforme para ganar guerras, claro que en el caso del ejército chileno, para ganar guerras contra el pueblo desarmado.Fue el día de la náusea, y ahora sólo queda esperar que las brisas justicieras del Pacífico alejen el hedor de esa carroña que recibió los honores de sus cómplices.
Gijón, 12 de diciembre de 2006
(*) Luis Sepúlveda es escritor, adherente de ATTAC y colaborador de Le Monde Diplomatique

Thursday, December 14, 2006

OBITUARIO CON HURRAS


Mario Benedetti


11 de Diciembre 2006


Vamos a festejarlo, vengan todos los inocentes, los damnificados, los que gritan de noche, los que sueñan de día, los que sufren el cuerpo....los que alojan fantasmas, los que pisan descalzos, los que blasfeman y arden, los pobres congelados, los que quieren a alguienlos que nunca se olvidan.Vamos a festejarlo, vengan todos, el crápula se ha muerto, se acabo el alma negra, el ladrón, el cochino, se acabo para siembrehurra que vengan todos, vamos a festejarloa no decir la muerte siempre lo borra todotodo lo purifica, cualquier día la muerte no borra nada quedan siempre las cicatrices.Hurra, murió el cretino, vamos a festejarloa no llorar de vicio que lloren sus igualesy se traguen sus lágrimas.Se acabo el monstruo prócer, se acabo para siempre. vamos a festejarlo a no ponernos tibios, a no creer que este es un muerto cualquiera.Vamos a festejarlo, a no volvernos flojosa no olvidar que este es un muerto de mierda.

Wednesday, December 13, 2006


















gentileza de axolotl

Tuesday, December 12, 2006





DE MUY MAL GUSTO ...

No por la imagen de los despojos del Asesino. La muerte es algo natural, en este caso se ha dado demasiado tarde o demasiado pronto según por dónde se mire. El mal gusto, lo que cuesta ver, es a estos tres energúmenos despidiendo a la Bestia con el saludo fascista.

Nadie los ha sacado a patadas en el traste, según tengo entendido. Se habrá tomado como algo natural -también-. Una demostración de afecto y respeto, según sus cánones, en un entorno en el que 'para nada' llama la atención.

Monday, December 11, 2006

Augusto Pinochet, asesino

Por José Pablo Feinmann
Y se murió de viejito nomás. En una cama, del corazón (un corazón al que sólo acudió para morir tranquilo), rodeado de fascistas y dolorosamente impune. Cuesta encontrar las palabras para expresar la monstruosidad de este hombre. Cuesta expresar la tragedia que implicó en nuestras vidas. Inauguró el golpe sangriento, con torturas sin límite, con desaparecidos. Todo golpe cruento, asesino, tomó su nombre: pinochetazo. Aquí, a mediados del ’75, todos lo decían: “Lo que se viene es el pinochetazo”. Debimos saberlo desde el ’73. Debimos saber que el adversario no sólo era poderoso, sino que era criminal. Debimos haber puesto cautela en nuestra mano; no frenarla, no pararla, pero reflexionar que lo de Chile nos dejaba muy solos, era muy desmedido y reclamaba eso: cautela. Pero estábamos embalados. En septiembre de 1973 la Facultad de Filosofía y Letras dictaba muchas de sus materias en la calle Córdoba. Un lindo lugar con una capilla en el medio. Ivannisevich se sacó una foto pegándole con un pico a una pared, destruyendo el edificio. Prolijos, dejaron la capilla. Todavía está. Un pibe de la JUP me dijo del golpe y se me ofreció para levantar mi clase. Yo, uno se creía, aún, inmortal, le dije que la levantaba yo y llevaba a mis alumnos a la marcha. Salimos de las aulas en busca de las marchas. Sentíamos más la presencia de la JP en las calles, vivando a Allende, que la relación profunda, íntima, que la tragedia de Chile tenía con nosotros. En esa época las fronteras parecían más lejanas. Si algo pasaba en Chile, no tenía por qué pasar aquí.
En seguida llegó la foto del carnicero. Es la perfecta caricatura del general golpista sudamericano. La jeta erguida, bigote, anteojos negros. Después, la noticia de la muerte de Allende. Decían: se suicidó. Un periodista le pregunta a Ricardo Balbín qué haría él en una situación así. El compadrito de comité se mandó una histórica: “¡Ah, no! A mí no me hacen eso”. No recuerdo qué dijo Perón. Nada memorable, sin duda. Poco tiempo después cruzaba la cordillera y se entrevistaba con el carnicero. ¡Qué vivos están estos recuerdos! Los dos bien trajeados de milicos. Con capas y todo. Le gustaban las capas a Pinochet. Al día siguiente o a los dos días empezaron a llegar los exiliados, los que apenas habían salvado el pellejo o los que habían sido escupidos del Estado Nacional. Estaban desechos. En Ezeiza, el gobierno argentino les tomó huellas digitales hasta de los dedos del pie. Les tomaron todos los datos, los ficharon bien fichados, les hicieron saber que si algo raro hacían duraban media hora sin ser arrestados. El Descamisado publicó las fotos y tituló: “Esta vergüenza se hace en nombre del peronismo”. Claro que sí: eso hizo el peronismo. Lo habría hecho cualquier gobierno argentino. Pero el peronismo de esos días era pinochetista. Cosa que, en algún oscuro rincón de su alma, siempre puede volver a ser si es necesario.
López Rega habrá brindado con champán. El carnicero de Chile estaba enseñando cómo se arreglan las cosas con el marxismo internacional, con la sinarquía apátrida. Nosotros empezamos a enterarnos de las peores cosas. Las versiones que llegaban sobre las torturas y las violaciones del Estado Nacional estremecían. ¿Era posible tanta crueldad? Se sabía que estaba lleno de tipos de la CIA el Estadio. Que los de la CIA eran especialmente activos en torturar y hasta enseñaban a los empeñosos chilenos cómo hacerlo. Las mujeres que maltrataron a Allende con los cacerolazos salieron a festejar. Otros agarraban lo que tenían a mano y huían. “Yo –me contó años después un escritor– llegué a Perú, me metí en una pensión, abrí mi valija y puse en un estante los libros que me había llevado. Ahí estaba mi nueva biblioteca: un libro de Cortázar, otro de Lezama Lima y uno de Tolstoi. Era todo lo que tenía.”
Un día lo fue a ver Borges. El carnicero estaba orgulloso: el gran escritor había cruzado la cordillera y estaba feliz de verlo. Le puso una condecoración bien llamativa. El gran escritor –el que decía un mar de concheterías bobas cada vez que “comía”, porque un concheto no “almuerza” ni “cena”, “come”, en lo de Bioy Casares– le dijo al carnicero: “Me honra esta condecoración porque Chile tiene la forma de una espada”. También la Thatcher lo recibió y le habló con un inglés lento y vocalizado como para que el carnicero entendiera: “Le agradezco su ayuda en la guerra de las Falklands. Sin sus informaciones nuestros pilotos no podrían haber hecho los blancos que hicieron”. El carnicero sonrió, satisfecho, goloso.
Cierta vez estaba en una clínica en Londres. Golpean a su habitación. Entra una mujer joven y resuelta, treinta años, por ahí. El carnicero, siempre seductor, sonríe y dice: “Pasa, niña. Dime, ¿a qué vienes?” “A arrestarlo, general. Por violaciones a los derechos humanos.” Se enfurece y llama a sus matones: “¡Saquen de aquí a esta comunista!” Días después regresa a su país. Llega en silla de ruedas. No bien baja del avión se pone de pie y saluda a los suyos. ¡Pícaro el carnicero! Otra vez había engañado a todos.
No sirve para nada que se muera. Que estos tipos se mueran cuando ya mataron a todos los que querían matar es un pobre consuelo. Ni un cáncer vale desearle. Nadie va a revivir por eso. Nadie va a sufrir menos de lo que sufrió. Deja, para colmo, problemas. Los militares de su país (al que le aseguró la economía y todos sabemos cuánto aprecian esto los pueblos) lo honrarán desde las armas. Michelle Bachelet no lo honrará desde el Estado. Pero habrá que organizar actos en toda América latina. El New York Times ha anunciado su muerte como la de un cruzado contra el marxismo. Puño de hierro, dictador, pero un hombre que no dudó. Fue la suma de las peores cosas que un ser humano puede ofrecer: lo de asesino lo sabemos, pero fue, además, ladrón, mentiroso, cínico, se rió de sus adversarios y de sus muertos. Descansará en paz porque morirse es eso. Pero que no tenga paz su memoria. Que nadie olvide sus crímenes. La era de horror que inauguró. Que en las escuelas argentinas se sepa que Pinochet es parte de nuestra historia, porque prefiguró nuestra pesadilla, porque inspiró a nuestros verdugos. Que gane la verdad por sobre la mentira con que sus adeptos buscan protegerlo. Que su nombre infunda pavor y que ese pavor se transforme en coraje: nunca más un Pinochet. Que haya un busto suyo con una placa en todos los países del mundo. Que esa placa diga: “Augusto Pinochet, asesino”. Porque olvidarlo sería como olvidar Auschwitz, el Estadio Nacional, la ESMA.

Friday, December 08, 2006

CHILE ¿QUIEN MANDA AL EJERCITO?


por Patricia Verdugo


El gobierno nos ha dicho que es de "mal gusto" hablar del funeral de Augusto Pinochet mientras esté vivo. Pero me temo que, cuando muera, será tarde. Y haremos -como país- algo que no podremos explicar ante la historia. Y cuando digo historia, hablo de nuestros hijos y nietos y todos los que vengan por delante.Ya parece claro que si el deceso ocurre durante el gobierno de Bachelet, no habrá "funeral de Estado" encabezado por nuestra Presidenta. Pero todo indica que el Ejército le rendirá "honores militares" a quien fuera su comandante en jefe por veinticinco años. Así lo informó la ministra de Defensa, ratificando lo antes dicho por el actual jefe del Ejército.Primera pregunta: ¿Es el Ejército un organismo privado que puede decidir por su cuenta y riesgo lo que le venga en gana? La respuesta: no, se trata de un organismo estatal y, por ende, pertenece a todos los chilenos. Es uno de los cuatro organismos de la defensa nacional, cuyos salarios, armas, pertrechos y costoso entrenamiento son pagados con los impuestos de todos los chilenos. A ellos les damos -por ley- el "monopolio en el uso de las armas" justamente porque nos pertenecen a todos. Segunda pregunta: ¿Quién manda al Ejército? Como ocurre en toda democracia, el poder militar está bajo el mando del poder civil. Hasta hace muy poco no era así, ya que la negociación que dio paso a la transición dejó "enclaves autoritarios" que impedían al Presidente de la República cambiar a los jefes del ejército, la armada, la aviación y la policía en caso de ser necesario. Además, les confería un rol clave en el Consejo de Seguridad Nacional que coartaba al Jefe de Estado. El cambio se logró durante la administració n del Presidente Lagos.Tercera pregunta: Si el ejército es obediente al poder civil, expresión de la soberanía popular, ¿quién realmente rendiría honores a Pinochet al momento de su funeral? Respuesta: todos los chilenos.Cuarta pregunta: ¿Amerita el general Pinochet recibir honores militares? Respuesta: no, porque él mismo es el mejor ejemplo de quien transgrede gravemente el honor militar.Vamos por puntos. Rendir honores al general Pinochet es homenajear a quien indultó a los asesinos del comandante en jefe, general René Schneider. Rendir honores a Pinochet es olvidar que su policía secreta asesinó, en Buenos Aires, al ex comandante en jefe Carlos Prats, su antecesor en el cargo. Y con él a su esposa.Eso para empezar a hablar.Sigamos con lo que dijo el general Joaquín Lagos Osorio durante la dictadura, evocando las masacres ocurridas en 1973, mientras era comandante en jefe de la Primera División del Ejército: "Fue y es un dolor tan enorme, un dolor indescriptible. Ver frustrado lo que se ha venerado por toda una vida: el concepto de mando, el cumplimiento del deber, el respeto a los subalternos y el respeto a los ciudadanos que nos entregan las armas para defenderlos y no para matarlos" (1).El general Pinochet violó todas las leyes nacionales e internacionales, incluyendo la Convención de Ginebra, para perseguir a los disidentes a su dictadura. Ordenó asesinatos, desaparición de prisioneros, torturas. Todo ello está debidamente acreditado en los informes oficiales de las comisiones Rettig y Valech. Con aprobación del Congreso y con cargo a fondos del Estado, se han pagado y se pagan indemnizaciones a las víctimas y sus familias.Quinta pregunta: Si el Estado ha reconocido las graves y sistemáticas violaciones a los derechos humanos ocurridas durante la dictadura de Pinochet, ¿cómo es que el Estado va a rendir homenaje, a través del Ejército, a quien fue el jefe máximo de los agentes del Estado que cometieron tales crímenes? Respuesta: no puede hacerlo.No vamos a agregar el fraude al Fisco que investiga la justicia tras descubrirse la red de cuentas secretas y millonarias del general Pinochet. Alguien podría decir que mientras no haya sentencia hay que darle el beneficio de la duda o la presunción de inocencia.Pero tenemos que anotar, finalmente, que rendir honores militares al general Pinochet constituye un acto deleznable en el marco de lo que la propia justicia ya ha establecido. Y constituye un acto que atenta gravemente contra la misma democracia que nuestros legítimos representantes -en La Moneda y el Congreso- han jurado defender.Última pregunta: ¿Qué cree usted que van a pensar los jóvenes cadetes de la Escuela Militar si participan en honores militares para el general Pinochet? Respuesta: que todo lo que hizo quien está en el féretro estuvo bien hecho. Y mañana, siendo generales, pueden repetir esas acciones. Si todos los políticos -desde el oficialismo y la oposición- nos repiten "nunca más", si hasta el ex comandante en jefe Emilio Cheyre pronunció ese "nunca más" con solemnidad, ¿en qué quedamos? Muchos ciudadanos creemos que esto pone en jaque nuestra futura "seguridad" como nación y tenemos derecho a sentirnos desconcertados.
(1) Los Zarpazos del Puma

Wednesday, December 06, 2006


Tasa de mortalidad por cáncer

de pulmón en la región

supera a la de Hiroshima


calle Matta de Antofagasta



Científicos de las universidades de California de EEUU y Católica de Chile concluyeron una nueva investigación sobre los efectos del mineral en la población de Antofagasta entre las décadas del '50 y '70. El informe, que será revelado íntegramente en julio, advierte que la tasa de mortalidad de cáncer al pulmón en la Segunda Región supera a la detectada en Hiroshima y Nagasaki. Según el estudio, las personas expuestas al arsénico durante su etapa fetal tienen mayores probabilidades de contraer enfermedades a lo largo de su vida, que aquellos que se contaminaron durante la adultez. Así lo establece un nuevo documento sobre las negativas consecuencias de la presencia de este mineral en la Región de Antofagasta, que será publicado íntegramente en julio próximo por la revista científica estadounidense Environmental Health Perspectives. La investigación estuvo a cargo del estadounidense Allan Smith, académico de la Universidad de California (Berkeley) y participaron, además, la doctora Catterina Ferreccio y el doctor en bioestadística, Guillermo Marshall, ambos de la Universidad Católica, quienes desde hace diez años trabajan en el tema. Según el estudio, la tasa de mortalidad por cáncer al pulmón provocada por este mineral en personas jóvenes es porcentualmente mucho mayor a la dejada por la radioactividad de las ciudades niponas de Hiroshima y Nagasaki, tras las bombas atómicas de 1945 y, a la vez, superior a la que se encuentra entre niños de padres fumadores. Históricamente entre 1950 y 1970, la población de Antofagasta se vio enfrentada, sin saberlo, a consumir altas cantidades de este elemento químico contenido en las aguas del río Toconce, que alimentaba a esta ciudad nortina que se encontraba en pleno crecimiento demográfico. El arsénico se encuentra en forma natural en las rocas y llega al agua a través del lavado que ésta misma hace en sus cursos superficiales o subterráneos, pero también se genera cuando es fundida para extraer minerales y, en tal caso, sale por chimeneas para ser despedido al aire. Mediciones llegaron a detectar concentraciones cercanas a los 860 microgramos por litro, en momentos que la norma internacional, en ese instante, fijaba el límite de 50 para el consumo humano. Hoy la Organización Mundial de la Salud (OMS) recomienda una concentración de 10 microgramos por litro. La dramática emergencia ambiental sólo se pudo remediar en 1978, a partir de la instalación de plantas de tratamiento de aguas y de la reducción progresiva de las concentraciones, acercándose a 50, para luego aplicar la norma de 10 que rige a todo el país. La doctora Catterina Ferreccio aseguró que con el ejemplo de Hiroshima y Nagasaki su colega de EEUU, el doctor Smith, intenta dar una señal fuerte para no cambiar los parámetros de arsénico en ese país, pero no quiere que por ello se cause alarma en Chile, ya que el tema, según su opinión, está “cerrado” desde el punto de vista sanitario. “La gente que nació entre 1950 y 1978 estuvo expuesta a niveles altos de arsénico, pero ahora ya no (...) Yo encuentro que se ha hecho todo lo que había que hacer (desde el punto de vista sanitario), pero de todas formas hay gente muy pobre que sigue comprando agua embotellada, lo que ya no se justifica”, sostuvo. Sin embargo, pese a la opinión de la doctora Ferreccio, Portadamédica.cl quiso ir más allá, en cuanto a las secuelas que aún se generan en la población y la ingesta de arsénico en el pasado por parte de los habitantes de la región. No es un misterio que el cáncer de pulmón aún genera víctimas en nuestros días en relación a la exposición histórica, lo que preocupa al gremio médico y lógicamente a la población regional. Recordemos que pese a la presencia de casos cáncer de pulmón en Antofagasta y Calama, aún esta patología mortal no se encuentra contemplada en el Plan Auge. Sin embargo, fue el propio ex subsecretario de salud, Antonio Infante, quien prometió a fines del gobierno de Lagos y durante su última visita a Antofagasta, la implementación de Auges regionales, que incluían enfermedades propias de nuestra zona como el temido cáncer de pulmón, lo que todavía no se cumple. A ello se agrega la presencia de arsénico en forma natural en el mismo suelo de las ciudades de la zona, situación que debiera obligar a las autoridades a intensificar la pavimentación de la región de Antofagasta


en Portada Médica