PINO OREGÓN

Nuestro buen ex-padre, hmmmm, mejor digámosle, ex-sacerdote, Gerardo Claps Gallo, ex s.j., en el diario de su devoción, mete su fino dedo intelectual en las llagas abiertas por el pino oregón.

Una mierda del gran carajo ha destapado el bueno de don Gerardo.

Nos hace remontar a la época del oro blanco (salitre), años en que corría la plata que se tasaba a peniques, tiempo en el que proliferaron hermosas casonas tipo inglés. Acá en esta ciudad, que tuvo una hermosa arquitectura urbana, ciudad y territorio de depredadores de la preciosa madera. Hubo bandas de desalmados que arrasaron con el patrimonio arquitectural, a dias de ser declarada monumento nacional, la ex-fundición Orchar fue arrasada, y tantas otras más, el mismo ferrocarril de Luksic echó abajo uno de esos monumentos, a Branko Marinov se le pone más blanca la cabeza de pura rabia, estábamos en los saqueadores y nos recordamos aquí del más famoso de todos: Osvaldo de Castro, más conocido como "el buitre del desierto" cerró su oficina salitrera, la que más bien era una pantalla, para dedicarse a sacar "palitos", ladrón de día claro, demoledor de la identidad regional.

Cultamente, con digno y prolijo lenguaje, don Gerardo, señala que un inmueble recientemente demolido hasta sus cimientos, está manejado por un representante del Alcalde de la ciudad de Antofagasta, la autoridad de marras, metió sus regordetas manos en el asunto demoledor y "el edificio en comento formaba parte de los bienes destinados al servicio educacional".

Insiste el educador que es don Gerardo Claps Gallo; "la autoridad que encabeza la Cormudeso (Corporación Municipal de Desarrollo Social), ha respondido a las críticas con una argumentación más que paupérrima. Se ha escudado en que esos muros no habían sido declarados monumento nacional, lo que habría impedido su demolición". El subrayado es nuestro.

Vaya, todo un chanta, fresco de raja y cara de callo, así de patudo da a entender que no hay impedimento legal para la piratería y el tráfico de esta madera fina procedente de la demolición, pues, no nos vaya a salir el guatón fresco que se las sabe por libro, que los " palitos" se los regalaron a los maestros de la constru para que preparen su choca.

Razón tiene,quien fuera fundador de la Universidad Católica del Norte al exigir "un inventario de vigas y listones que fueron arrancados".

Además, "el caimán", así le decían en el barrio Bellavista, a este obeso mórbido, este caballero que se las sabe todas en cosas de malabares y torceduras, no ha dicho a nadie dónde guardará todo.

¡Qué gente mal pensada!

No en vano comentan por ahí, que este maula que sabe lanzar sus garras, es experto en pegar jugosos cortes a cuanto proyecto o billete anda suelto por ahí dicen, no me consta, pero el que me lo dijo es muy allegado al tipo, que es accionista en una empresa constructora, por lo tanto es patrón, explotador, chupa sangre como dice don Camilo Escalona el hombre admirado por Lemebel, qué cabrón ¿será socialista?

Todo un crápula.

Con razón hay tanto griterío en el país, no necesitamnos pensar o tener dos dedos de frente en manos de esta gente está el gobierno. Derechistas disfrazados de izquierdistas, qué izquierdistas son izquierdistas a la violeta o al pedo.

Será bueno que se aclare todo esto. la mierda huele muy mal.